GARCÍA CASTILLA, JAIME
Estudio primaria en el Colegio Eduardo Rojo. Y allí se apunto a clases de jazz, que era lo mas parecido a danza que tenia en su colegio, como una de sus actividades extraescolares. Estaba el solo entre las chicas. Actualmente continua sus estudios en el Instituto Cervantes. Sus padres son administrativos, y desde siempre le apoyaron. En el Certamen Internacional de Zaragoza de 199 obtuvo el Primer premio, y también el premio del publico. En el año 1999 obtuvo una beca denominada "Europa Dance" que le permitió estar durante un mes y medio en Francia, en clase magistrales de importantes coreógrafos europeos. En el año 2000, logró acceder a la convocatoria de esa beca nuevamente. Suele, con los estudiantes del Real Conservatorio de Danza, hacer representaciones en colegios lo que por una parte le permite adquirir tablas, y por otra parte logra que escolares cojan cierto gusto por la danza. Su vida se organiza asistiendo por la mañana al Real Conservatorio, y luego por la tarde al Instituto. Jaime García Castillo cursa actualmente el 5º curso del segundo nivel. En el Real Conservatorio En enero de 2001 ha obtenido la medalla de Oro, premio de Excelencia en el festival de danza de Lauxanne. Este premio llevaba seis años sin ser otorgado y le permite estar durante un año bailando con la compañía internacional que el ganador escoja. Ha elegido el irse al Ballet de San Francisco por que combina repertorio clásico y moderno. El se siente un bailarín completo.
Información recopilada a Marzo de 2001
EL REAL CONSERVATORIO PROFESIONAL DE DANZA
El ingreso se suele hacer, tras unas severas pruebas, que permiten descubrir a los que posteriormente serán bailarines internacionalmente reconocidos, alrededor de los 8 a 9 años. El estudiante tiene que ir superando los cuatro años que corresponden al grado elemental, y tras una prueba pasan al grado medio, en donde han de estudiar intensamente durante seis años. En este nivel atienden a tres estilos: el ballet clásico, el español y el contemporáneo. La directora actual del Real Conservatorio Profesional de Danza es Virginia Valero.
HEMEROTECA El bailarín Jaime García Castilla, medalla de oro en el concurso Prix de Lausanne. El bailarín Jaime García Castilla, obtuvo el domingo la Medalla de Oro en el concurso internacional de danza Prix de Lausanne para jóvenes bailarines, uno de los mas prestigiosos certámenes del mundo de la danza. García Castilla, alumno del Real Conservatorio Profesional de Danza, concursó con las variaciones de "El príncipe Albertch" del segundo acto del ballet de "Giselle"; "Bach per gioco", con música de J. S. Bach y coreografía de Giorgio Mancini, como variación contemporánea; y como variación libre presentó "No Code", con música de Jerónimo Maesso y coreografía de Ricardo Franco. El jurado de la presente edición del Prix de Lausanne, presidido por John Neumier, otorgó a García Castilla, además de la medalla de oro, galardón que hacía seis años que no se concedía, el Premio al Mejor interprete en la especialidad de danza contemporánea, además de una beca para formarse como bailarín en la compañía que él elija. Jaime García Castilla ingreso en el Real Conservatorio Profesional de Danza con ocho años, y desde entonces ha cursado estudios en esta institución. El fallo del concurso, al que se habían presentado cien candidatos de treinta países, incluyó un primer premio al francés Ludovic Ondiviela, y un segundo premio a la suiza Sarah Kora Dayanova, alumna de Noella Pontoix, ex bailarina estrella de la Opera de París.
Redacción de "La Razón" Sección Local 30/Enero/2001
Jaime García, premio de Excelencia en el Festival de Danza de Lausana.
La medalla de oro o premio de Excelencia otorga al bailarín una beca de un año para estudiar en la escuela que elija de entre 22 seleccionadas por los organizadores. El de interpretación contemporánea, le permitirá participar en un concurso en una compañía especializada en arte contemporáneo. El bailarín madrileño, formado en el Conservatorio profesional de Danza desde los siete años, ha elegido el San Francisco Ballet, afirmando en la noche de ayer, que lo sentía todo "como si fuera un sueño". El presidente del jurado del prestigioso concurso fue John Neumeier, coreógrafo y director del Ballet de Hamburgo, quien afirmó tras la lectura de los premios que el joven español había barrido porque era un "bailarín completo y eso es lo que hoy se necesita", refiriéndose a la amplia formación técnica que le capacita para interpretar la gran variedad de estilos que hoy confluyen en el repertorio del ballet. Jaime García había destacado desde la primera eliminatoria en la que compitieron 350 jóvenes de todos los continentes. La opinión general fue que por encima de alardes técnicos, el madrileño destacaba por el sentido global y la huella que dejaban sus actuaciones. Julia Martín ( Corresponsal en Suiza) El Mundo. 30/Enero/2001
ENTREVISTA en "Madrid y m@s" Realizada por Rosa María Echeverría
-¿El bailarín nace, se hace, o brota por generación espontánea como una rara especie?
- Ese gran juego, ¿cuándo dejó de serlo? - Cuando tuve siete años se marcho el profesor y me recomendó que me presentara al Real Conservatorio Profesional de danza de Madrid. Se presentaron muchísimos niños pero pude entrar. Son diez cursos y los fui superando feliz de la vida. - ¿La danza, expresión vital de un mundo de sueños. ¿cuándo tuvo lugar ese encuentro fugaz con el público? - Con catorce años bailé el "Paso a tres de Militone" del ballet del Cascanueces. Fue una experiencia maravillosa que no podré olvidar nunca. Mis padres jamás pensaron que aquella afición iba a convertirse en una carrera profesional, pero me han apoyado muchísimo. - En este premio compiten los mejores bailarines jóvenes del mundo ¿Ha sido difícil conseguir esta medalla? - Si, mucho, porque el nivel era muy alto. Nos presentamos 126b candidatos de 30 países. Tenias que elegir entre cinco, una variación clásica obligatoria. Yo me incline por la variación del Príncipe Albert, de Giselle, y lo mismo sucedía con una variación contemporánea. Bailé "Bach per gioco" de un coreógrafo italiano, con mucho movimiento.
- ¿De Madrid al cielo? - Si, pero bailando. Creo que en los colegios habría que dedicar menos tiempo al fútbol y a los deportes, y dar mas clases de danza que desarrolla mucho la comunicaron. Se descubrirían grandes talentos.
Entrevista de Gema Elzaguirre El joven bailarín ha dejado muy alto el pabellón nacional en el certamen suizo donde era el único representante español junto a un centenar de candidatos de 30 países. García Castilla echa de menos mas apoyo para ese arte. - Baila desde los siete años ¿Cómo se decanta un niño por la danza? - En mi familia nadie ha bailado nunca, simplemente lo veían bonito. Pero desde muy pequeño me ha encantado bailar y en el colegio iba a las clases extraescolares de gimnasia rítmica, jazz, sevillanas. - Y luego pasó al conservatorio - Hice las pruebas a los siete años. Al principio mis padres se asustaron un poco porque pensaban que el conservatorio supondría solo un poco de perfeccionamiento, pero sin llegar a una posible carrera profesional. - ¿Cómo ve la sociedad a los bailarines? - Todavía hay quien me dice que bailar es de chicas. Pero lo que de verdad me ha molestado es que la ", que siempre emite deportes variados, no haya retransmitido el certamen de Suiza cuando había un finalista español. - ¿Qué hace en un día normal? - A las 9 de la mañana empiezan las clases en el Conservatorio, hasta las 15:30 horas. Luego voy al Instituto, hago COU, a las 16 horas. - ¿ Y después ira a la Universidad? - De momento no sé si me va a ser posible, porque iré a estudiar al San Francisco Ballet, pero me gustaría estudiar Biológica o Fisioterapia. - ¿Le queda tiempo para divertirse?
- ¿Y la comida, la tiene restringida? - No sigo régimen estricto, tomo de todo: pescado, verduras, carne... - ¿Carne? ¿Aun con vacas locas? - Lo de las vacas locas no me importa. Eso le preocupa mas a mi madre. Jaime
García Castilla, la mas firme promesa de la danza española, estudia COU
y vive en Entrevías. "Para
mí ser de Vallecas es un orgullo" Son
las tres y cuanto de la tarde y desde las nueve de la mañana lleva ensayando
"El sueño de Tina" que se representará días después, a finales
de febrero, en la Real Escuela Superior de Arte Dramático. Jaime,
junto a sus compañeros de reparto, repiten una y otra vez los movimientos
indicados por la profesora. Sale un momento al pasillo y mientras habla,
con la cabeza sigue los movimientos de la música, los pies se le van tras
el ritmo. Jaime
es el mayor de dos hermanos, el pequeño estudia en la Escuela Profesional
Primero de mayo, y prefiere el tenis a la danza. Sus padres viven en Entrevías,
y nunca pensaron que la afición de su hijo iba a convertirse un día en
una carrera profesional.
QUE
ES SER BAILARÍN
VALLECAS
Y EL BAILE
La
conversación se ha desarrollado en la sala del Conservatorio donde ensaya.
Son casi las cuatro y aun no ha comido. Dice que no sigue un régimen estricto,
come un poco de todo para mantenerse en forma: carne, pescado, verduras..
apenas le queda tiempo para salir pitando al Instituto Cervantes. En junio
terminará el curso y a los pocos días cogerá el avión para San Francisco
donde le espera un año muy intenso que puede significar mucho en su carrera
profesional.
JAIME
QUIERE BAILAR Con
ocho años realizó una prueba para entrar en el Conservatorio y fue seleccionado.
Poco podía sospechar entonces que sacaría los diez cursos y se convertiría,
según algunos expertos, en la mayor promesa de la danza. Lo
demostró en el ultimo concurso de ballet de Lausana. Hacia
seis años que quedaba desierto el Gran Prix de Excelencia, y este chico
de Entrevías, el único representante español en ese certamen, donde compitieron
j126 aspirantes de 30 países, lo logró a finales de enero junto a otros
dos máximos premios, el primer premio profesional y el de interpretación
contemporánea. Llevaba dos meses de preparación intensiva con su profesora
Eva López. El
presidente del jurado, coreógrafo y director del Ballet de Hamburgo, afirmó
que Jaime había barrido porque era un bailarín muy completo. Eligió para
la ocasión una variación del príncipe Albert de Giselle, en clásico y
"Bach per gioco" en contemporáneo. Ahora
le espera un año en San Francisco y quizás mas tiempo en caso de que la
compañía donde va a presentarse decida integrarlo en su plantilla. Le
espera un futuro muy brillante según coinciden los expertos que le han
visto bailar. A finales de febrero actuó en "El sueño de Tina",
representado en la Escuela de Arte Dramático. Hasta junio, cuando haga
las maletas, le quedan todavía muchas horas de ensayo y de actuaciones.
Y después a seguir bailando. Reportaje
de Silvestre Fernández Revista
VALLE DEL KAS Marzo
2001 Número 182
|